Especialistas de la salud respiratoria piden extremar las medidas de prevención, mantener la adherencia al tratamiento del asma bronquial, y vacunarse contra el COVID-19 y la influenza.
Fecha: 4 de mayo 2021
El asma bronquial es una enfermedad respiratoria crónica, se caracteriza por inflamación de la vía aérea ocasionando dificultad respiratoria, limitación en la actividad física, tos y expectoración mucosa, deteriorando la calidad de vida de los enfermos en forma significativa.
“La adherencia al tratamiento con antiinflamatorios inhalados, la suspensión del tabaquismo en los pacientes fumadores, evitar la exposición al humo de tabaco e irritantes ambientales, la realización de actividad física en forma sistemática y los controles periódicos en el sistema de salud permiten mejorar la capacidad funcional respiratoria de los enfermos, disminuyendo el riesgo de complicaciones en caso de infecciones respiratorias tales como el COVID-19”, precisa el Dr. Fernando Saldías, jefe del Departamento de Enfermedades Respiratorias UC.
“Un rol fundamental juega también el kinesiólogo respiratorio, quien forma parte del equipo de salud que atiende y evalúa a los pacientes asmáticos, su condición funcional respiratoria y promueve activamente la adherencia al tratamiento y la realización de actividad física acorde a la edad cronológica de los enfermos”, agregó el Dr. Saldías.
Este 4 de mayo se conmemora un nuevo día mundial contra el asma, una enfermedad de alta prevalencia en Chile y que ubica a este segmento entre los grupos de mayor vulnerabilidad frente a la actual pandemia. Para Macarena Espinoza, docente de la carrera de Kinesiología UC, es momento de extremar las medidas preventivas del contagio como es el lavado de manos, el uso de mascarilla y el distanciamiento social, así como la adherencia al tratamiento por asma y la consulta temprana y oportuna, tanto presencial como teleconsulta médica o kinesiológica, en caso de síntomas de alarma como tos, dificultad para respirar y cansancio.
La docente de Kinesiología UC insistió en no automedicarse, ni suspender los tratamientos prescritos y administrar correctamente el inhalador con aerocámara para asegurar la incorporación de las dosis indicadas en el pulmón, especialmente en aquellos con corticoides y efecto antiinflamatorio. Asimismo, indicó que es muy importante vacunarse contra el COVID-19 y la influenza, especialmente para estos pacientes.
Otras recomendaciones de los especialistas y hoy con mayor énfasis, es la de evitar la exposición a factores irritantes como polvo de habitación, ácaros, humo y derivados de la combustión de biomasa y, sobre todo, eliminar el humo de tabaco de los ambientes públicos y privados. En cuanto al recurrente uso de cloro en estos días y sabiendo que constituye una sustancia irritante para los pacientes asmáticos, se sugiere mantener al paciente en otra habitación durante su uso y procurar ventilar los espacios durante y luego de su empleo.
Un mensaje importante es consultar oportunamente a un médico broncopulmonar de forma presencial o virtual a través del servicio de telemedicina, contemplando el seguimiento de su médico y kinesiólogo tratante, más aún si aumentan los síntomas respiratorios: tos, dificultad respiratoria, silbido u opresión en el pecho o limitación significativa en la actividad física; de modo de intervenir tempranamente frente a una crisis bronquial obstructiva y tratarla adecuadamente.